La ola de frío y el incremento de la tasa de gripe, que ya afecta a 210 de cada 100.000 habitantes de las Islas, ha provocado una mayor afluencia de enfermos a los centros de salud.
Los médicos de atención primaria están atendiendo una media de 50 pacientes al día, cuando habitualmente atienden 35 enfermos por facultatitivo, lo que ha provocado, según confirman desde el IB-Salut, que se hayan tenido que aumentar las dotaciones de médicos y enfermeras.
Los centros de salud con mayor incremento de demanda en Palma son los de son Pizà, son Gotleu y Pere Garau. También se ha incrementado el número de pacientes en Manacor.
Por otra parte los hospitales del IB-Salut contaban ayer con una ocupación media del 99 por ciento. El hospital de Son Dureta derivó el martes un total de 4 pacientes a la Clínica PalmaPlanas y 21 en la jornada de ayer.
El hospital de Son Llàtzer remitió el martes a 16 pacientes a la Clínica Femenia, aunque durante el día de ayer pudo atender toda la demanda asistencial y no tuvo que derivar pacientes a otras clínicas. Mientras que el hospital de Manacor que cuenta con 10 camas extras en el hospital de Muro no tuvo que derivar a ningún paciente y pudo atender toda la presión asistencial.
Por lo que hace referencia a las intervenciones quirúrgicas Son Dureta suspendió ayer 4 de las 85 operaciones programadas, y en el resto de hospitales del IB-Salut se llevaron a cabo todas las intervenciones previstas.