Tal y como preveían los meteorólogos las montañas de la Serra de Tramuntana amanecieron ayer cubiertas por una densa capa de nieve. De la nevada de ayer destacó que llegó a cotas bajas sin llegar a cuajar a lo largo de toda la mañana en la mayoría de los pueblos situados en la falda de la Serra. Los vecinos de Inca, Pollença, Selva, Lloseta o Alaró se levantaron de la cama con los tejados y calles cubiertos de una fina capa de hielo y nieve.
Escorca fue uno de los municipios más afectados por la nevada y ayer eran pocos los que se atrevían a transitar por el Santuari de Lluc. Las tiendas y comercios del Santuari abrieron sus puertas pero lo cierto que eran pocos los clientes que pararon a comprar algún que otro detalle. El encargado de la gasolinera del Coll de sa Bataia, Miquel Vallori, que está acostumbrado a las nevadas de invierno, relataba ayer: «Comenzó a nevar ayer (por el lunes) a partir de las cinco y media de la tarde y cuajó a partir de las siete; durante toda la noche ha nevado y ha hecho mucho viento y hemos sufrido temperaturas de tres grados bajo cero».
Otro de los vecinos de Escorca, Sinto Rosselló, propietario del restaurante Escorca, comentaba ayer que «la situación está bastante mal. Hace años que no ha caído una nevada de estas características; recuerdo que en el 1985 también nevó mucho». «Tenemos tres centímetros de hielo y unos 14 de nieve y hoy no hemos podido abrir el restaurante», añadió. Por otra parte, Valldemossa amaneció ayer completamente nevado y los vecinos, por lo que cuentan no ocurría «desde hace 25 años». En Sóller la Nieve llegó a los 700 metros pero la ciudad solo recibió algunos copos. Para estos días se ha montado un dispositivo de Salvamento entre Cruz Roja de Sóller y la Policía Local. La nieve también visitó distintos municipios del Pla de Mallorca como son Sant Joan, Vilafranca, Petra, Felanitx, Montuïri, Porreres, cuajando principalmente en la fora vila de estos pueblos.