Convocar un evento tan multitudinario como el Festival de los Espléndidos Reyes Magos, celebrado el domingo en el Pueblo Español, no es tarea fácil. Un amplísimo equipo de personas trajando ante el público y en la trastienda, hizo posible que cada detalle saliera según lo previsto para que el público sólo se tuviera que encargar de pasárselo bien. Camareros, personal de cocina, de mantenimiento, mozos, técnicos de imagen y sonido, fotógrafos, azafatas, guardias de seguridad, policías locales, efectivos de la Creu Roja y un largo etcétera que sería imposible enumerar, se emplearon a fondo en los preparativos y durante el desarrollo del evento.
Entre ellos, Jaume Darder, director del Pueblo Español, pasó la mañana supervisando el servicio, acompañado de Miquel Joy, director comercial de prensa de GBM, que no dudó en poner una mano donde le necesitaron, como en el reparto de la ensaimada. Otro equipo que no paró de ir de un lado a otro fue el de azafatas de Ultima Hora, que hicieron un buen trabajo repartiendo regalos y ayudando a los presentadores a entregar las placas conmemorativas y ramos de flores a los artistas, entre otras tareas. Un agradecimiento especial merecen Joana Maria Amengual, Marga Torres y Jeroni Martorell, los tres miembros de la Creu Roja, que, aunque afortunadamente no tuvieron que atender a nadie, ahí estaron toda la mañana, con la ambulancia a punto, por si se requería su atención y velando por la salud de todos.
La alcaldesa de Palma, Catalina Cirer, puso la nota simpática cuando varias personas del público le pidieron autógrafos, mientras le hacían fotos con sus cámaras y teléfonos móviles. Si primero se declaró fan de Lorenzo Santamaría y consiguió el vaso que había utilizado el artista para su colección de objetos de famosos, después fue ella misma quien se encontró rodeada de sus fans.