Amigos, directivos de empresas o simplemente compañeros aprovechan estas fechas para realizar un obsequio. El más recurrente son las cestas de Navidad que, gracias a su presentación y su contenido, dejan más que conforme a la persona receptora. El Corte Inglés ofrece una amplia gama de estos regalos navideños a partir de dos líneas diferenciadas. La primera son los regalos ya terminados que el cliente puede elegir sobre un catálogo de más de 70 modelos. La cesta más cara de este catálogo asciende a 1.056 euros y el baúl a 1.500 euros. Además, también se ofrecen una selección de más de 150 cajas de vino, entre los 21 y los 500 euros, cajas jamoneras y lotes.
La segunda línea son los regalos a la carta, donde el cliente puede componer su propio obsequio. Este modelo de regalo se realiza en el Club del Gourmet, que ofrece una gran selección de productos gastronómicos de primera categoría. Existen 16 tipos de presentación y el precio mínimo es de 600 euros. Además, la novedad de este año es regalar frutas de gran calidad presentadas en cajas, cuyo precio oscila entre 29 y 39 euros. El soporte que se utiliza para presentar estos regalos van desde las cajas de cartón para los lotes y las de madera para los vinos y los jamones hasta el mimbre para cestas con diseño o baúles. El año pasado, El Corte Inglés vendió aproximadamente 3.500 cestas, entre el centro de Avenidas y el de Jaume III.
Las cestas se suelen vender entre el 13 y el 23 de diciembre, aunque los centros de la Isla mantienen el expositor hasta Nochevieja, mientras que en el resto de la Península se retira en Nochebuena. Poder degustar los mejores cavas, vinos, champañas, los más selectos embutidos y los dulces más apetitosos se convierte en un auténtico placer durante la época navideña. Las cestas y los lotes de Navidad llevan años introduciéndose en nuestras casas para felicitarnos las fiestas con los sabores más gustosos. El origen de esta tradición no se conoce con exactitud, aunque muchos expertos creen que se remonta a las ofrendas que, tanto los Reyes Magos como los ciudadanos, daban al niño Jesús en su nacimiento. Del incienso, la mirra y el oro se ha pasado a los turrones, mazapanes, jamones y licores más exquisitos.
Samantha Coquillat