El gerente de la EMT, Alejandro Lacour, se reunió ayer con una representación del comité de empresa para hablar sobre las sanciones impuestas recientemente a siete conductores. La dirección les consideraba responsables de varios accidentes y los trabajadores se oponían a que fuesen sancionados, e incluso habían anunciado posibles movilizaciones. Finalmente, la dirección aceptó paralizar de momento los expedientes abiertos, así como remitir al Tribunal d'Arbitratge i Mediació de les Illes Balears (TAMIB) los expedientes ya resueltos, tres en estos momentos. También se acordó crear una comisión mixta para debatir, una vez al mes, los problemas cotidianos que puedan surgir en la empresa.
Por otra parte, ayer entró en funcionamiento la línea 27 de la EMT, que unirá la Porta de Sant Antoni con Sa Garriga y que servirá de refuerzo para la línea 12 hasta Son Sardina. La nueva línea tendrá una frecuencia de 60 minutos, saliendo a las horas en punto desde la Porta de Sant Antoni y treinta minutos después desde Sa Garriga. La línea 27 llegará también hasta el nuevo conservatorio, en la calle Capitán Salom.