La teniente de alcalde de Medi Ambient del Ajuntament de Palma y presidenta de Emaya, la popular Catalina Terrassa, dio a conocer ayer que los controladores medioambientales han llevado a cabo en 2004, a falta de quince días para que concluya el año, 60.132 actuaciones, cuando en 2003 realizaron un total de 28.700 actuaciones, por lo que ha habido un aumento del 109,6 por cien en los controles efectuados. Terrassa añadió que de las actuaciones citadas, en 2004 se levantaron 7.997 actas de denuncia, lo que representa un 13,3 por cien del total de controles efectuados durante este año, mientras que en 2003 se levantaron 3.050 actas de denuncia, lo que supuso un 10,7 por cien del total de controles efectuados el pasado año. Comparando las actas de denuncia levantadas en 2003 y en 2004, se ha producido, por tanto, un incremento del 162,2 por cien.
Cabe recordar que dichos controladores iniciaron sus actuaciones en 2001, con 10 integrantes, que ahora son ya 21, y que entre sus funciones está la de explicar a los ciudadanos la Ordenanza Municipal de Limpieza, Desechos y Residuos Sólidos Urbanos, aprobada este año. En sus explicaciones, los controladores hacen especial hincapié en la obligación que tienen los ciudadanos de depositar los residuos en los contenedores en los horarios establecidos, entre las 19.00 y las 23.00 horas, en exigir a los dueños de animales que retiren las deposiciones de sus mascotas de la vía pública y en recordar a supermercados, comercios, restaurantes y bares que han de disponer de contenedores propios, bien sellados, para depositar en ellos los residuos que generan sus locales.
Los controladores van siempre provistos de una cámara fotográfica, para recoger en imágenes la infracción detectada, de un bloc de actas de denuncia y de un carnet identificativo. Terrassa recordó que cuando un controlador detecta la comisión de una infracción, nunca levanta acta de denuncia si se trata de la primera vez. En estos casos, se avisa al infractor de que en caso de reincidir sí se levantará acta de su actuación incorrecta. Las actas de denuncia levantadas por los controladorees medioambientales no generan de forma automática una sanción, ya que se sigue un proceso que puede desembocar o no en la imposición de una multa. Una vez iniciado el expediente sancionador, se le comunica al afectado, que dispone de 15 días para formular las alegaciones pertinentes, al igual que cuando se le presenta la propuesta de sanción. Finalmente, una vez impuesta la multa, el afectado puede presentar un recurso de reposición si así lo desea.