El equipo de gobierno del Ajuntament de Palma logró sacar adelante los presupuestos para el año que viene con la abstención «en positivo» del PSM y el voto en contra de PSOE y EU-EV. Pere Muñoz explicó su decisión de abstenerse en el hecho de que el equipo de Cirer ha aceptado incorporar al presupuesto las 76 propuestas que realizaron los nacionalistas, y que implican un cambio de destino de 220.000 euros en diversas partidas municipales.
No obstante, el concejal nacionalista precisó que tampoco son los presupuestos del PSM, por lo que optaban por la abstención.
Cort podrá gastar el año que viene 274 millones de euros a los que hay que sumar otros 41 millones más de los organismos autónomos y 181 millones de las distintas empresas municipales, cuyas cuentas también quedaron aprobadas ayer. El presupuesto propio de Cort sube un 7,05 con respecto a 2004, mientras que el presupuesto consolidado con el de organismos autónomos y empresas sólo sube un 0,57 con respecto a este año.El teniente de alcalde de Hisenda, Pedro Àlvarez, defendió unas cuentas que calificó de transparentes y participativos, pero defendió especialmente que el equipo de gobierno ha sido capaz de aumentar el gasto previsto para el año que viene sin tener que recurrir ni al endeudamiento ni a una subida de los impuestos. «Palma es uno de los municipios que están más bajos en cuanto a presión fiscal», dijo. La alcaldesa de Palma, Catalina Cirer, valoró por su parte que el PSM optara por la abstención «para superar las discrepancias en beneficio de Palma».