El hospital de Son Dureta, con el apoyo de la Conselleria de Sanitat, puso ayer en marcha la recién creada unidad de transporte sanitario pediátrico y neonatal. Esta unidad se encargará de trasladar a la UCI de Son Dureta, que en estos momentos es el hospital de referencia especializado en pediatria, a los niños que nazcan con dificultades o que sufran una enfermedad grave, y que se encuentren ingresados en otros centros. El proyecto fue presentado ayer por el director general del Servei de Salut, Sergio Bertrán, el gerente de Son Dureta, Carles Ricci, la gerente del 061, Dolores Riart, y por la responsable del área de pediatría del hospital, Juana María Román.
La pediatra explicó que este servicio contará con tres médicos especializados en el tratamiento a los niños con enfermedades graves. Estos pediatras acudirán en ambulancia a los centros médicos donde se encuentre ingresado algún niño en estado grave o recién nacidos con graves problemas. Los especialistas asesorarán a los médicos que atiendan a estos enfermos y les ayudarán a estabilizarlos. Una vez que se confirme que el niño está en condiciones de ser trasladado en ambulancia, se le conducirá a la UCI de Son Dureta, que es el centro de Balears que cuenta con más medios para la atención de estos pacientes.
La doctora Román explicó que con este programa se pretende reducir el número de muertes de niños, sobre todo de recién nacidos, así como de las secuelas que pueden sufrir. La unidad contará con tres especialistas que estarán localizables las 24 horas del día, y que acudirán a todos los centros en los que se realizan partos cuando se reclame su intervención. Román señaló que cuando un niño nace con problemas lo más importante es la estabilización del paciente, y no tanto el traslado urgente a otro hospital con más medios, por lo que ésta será la principal misión que realizarán estos tres pediatras especializados.