Descubrir las tradiciones de la Isla es un tarea casi obligada para los inmigrantes que residen en ella. Por esta razón, Cáritas Mallorca organiza una serie de talleres para estas personas, como la bunyolada que tuvo lugar ayer en las aulas de la Fundació Joana Barceló. Más de treinta inmigrantes participaron en este tradicional acto. Se trata de personas que participan en el programa «Viure plegats», en el que se imparten clases de lengua.
Con motivo de la fiesta de las verges, que se celebrará esta semana, la profesora Aina Mascaró explicó a sus alumnos el sentido de esta tradición y la costumbre de que el pretendiente de una fadrina la corteje dedicándole una serenata y regalándole una rosa. A lo que ella responde ofreciéndole una degustación de bunyols. Tras las explicaciones, procedieron a comer los típicos bunyols, en un ambiente de alegría y compañerismo. Los alumnos asistentes se quedaron encantados con esta tradición.
Mascaró destacó que el objetivo de este taller es que los inmigrantes «conozcan un poco mejor el lugar donde viven y sus tradiciones, se integren y aprendan el idioma». Los asistentes eran inmigrantes procedentes de países del norte de Àfrica como Marruecos, Guinea o Nigeria, y de Europa del Este, como Bulgaria y Ucrania, entre otros. Cáritas Mallorca realiza cada mes un taller, cuyo tema depende de la temporada en la que tenga lugar. Así, en Navidad, los alumnos aprenderán a hacer turrones, y en Semana Santa, panades.Samantha Coquillat