M.CAMPOMAR
La Cámara de Comercio de Mallorca, Eivissa y Formentera abrió hace
unos meses el debate sobre la ampliación del Puerto de Palma con la
presentación de un estudio que reflejaba la necesidad de
descongestionar sus instalaciones y adaptarlas a las nuevas
necesidades. Una de las propuestas de la Cámara de Comercio era la
ampliación del Dique del Oeste, ganando un kilómetro hacia la mar.
La Autoritat Portuària de Balears tomó nota de esta propuesta y ha
empezado a redactar un Plan Director de Infraestructuras Portuarias
que recoge esta posibilidad. Joan Verger, presidente de la
Autoritat Portuària destacó que «en siete u ocho años el Puerto de
Palma quedará colapsado, por lo que es necesario tener un Plan que
recoja las previsiones a veinte años vista y prevea esta
ampliación».
Respecto a la propuesta de ampliación presentada por la Cámara de Comercio, Verger aseguró que «la solución es buena, porque el crecimiento del Dique del Oeste permitiría trasladar la actividad de los barcos de mercancías y de reparación de embarcaciones a esta zona y destinar el espacio que actualmente se dedica a estas actividades a ampliar la zona de ocio». A pesar de ser una buena solución, el presidente de la Autoritat Portuària mostró su preocupación ante las dificultades para llevar a cabo esta iniciativa. El problema, según Verger, es que «el calado del Dique del Oeste es de entre 26 y 28 metros, lo que encarece enormemente la obra, que costaría unos mil millones de euros.
Verger recordó que hasta 2007 «los puertos de Balears cuentan con la financiación de los Fondos Europeos, pero una vez que se acaben será muy difícil conseguir la financiación para este proyecto. Habríamos de recurrir a los Presupuestos Generales del Estado, lo que es muy complicado, y financiar este proyecto con recursos propios es inviable, ya que la capacidad de inversión que tenemos es de tan solo unos 15 millones de euros». Por otra parte, las obras de la primera fase de ampliación del Moll Vell de Palma comenzarán antes de que finalice el año y serán ejecutadas por la empresa FCC, según afirmó Verger.