El delegado del Gobierno en Balears, Ramon Socias, auguró ayer que la directiva europea de seguridad en el transporte marítimo que entrará en vigor en julio del 2005 obligará a los viajeros a someterse al control personal y de equipajes una hora o 45 minutos antes de la salida de sus barcos.
Así lo aseguró Socias tras visitar las nuevas instalaciones habilitadas en la Estación Marítima 2 del Port de Palma para el personal policial encargado del control de equipajes, dependencias que ocupan unos 100 metros cuadrados y que han sido financiadas por la Autoritat Portuària con una inversión de 250.000 euros.
Desde el pasado mes de julio está vigente una normativa europea referida sólo a los cruceros y el próximo año se pondrá en marcha la que afecta a los pasajeros de cabotaje, cuyos equipajes serán revisados mediante escáner.El presidente de la Autoritat Portuària, Joan Verger, que acompañó al delegado en su visita, confirmó que en la primera fase de aplicación del nuevo sistema de seguridad no se someterán al control de rayos X los vehículos, aunque apuntó que actualmente ya se comprueban las matrículas de todos los turismos y vehículos pesados que se embarcan en los transbordadores.
Socias indicó respecto a la normativa aplicable desde el próximo julio que «se tendrá que concienciar a la gente de que es una medida que se adopta para mejorar su seguridad».