El PSOE advirtió ayer al Govern de Balears que lo que ha sucedido con los Presupuestos de 2005 (que no han incluido partidas para financiar varios proyectos de carreteras) puede repetirse en los próximos años. Francesc Antich y Francesc Quetglas comparecieron ayer ante los medios de comunicación y explicaron que el Ejecutivo autónomo había licitado obras por su cuenta, que éstas no tenían la supervisión del Ministerio de Fomento y que, a todos los efectos, era como si esas obras «no existieran». Quetglas explicó que eso es, precisamente, lo que había sucedido con los Presupuestos: que únicamente habían previsto el pago de la única carretera que tenía el visto bueno de Foment: la de Eivissa-Sant Josep. Según Quetglas, que fue conseller d'Obres Públiques cuando gobernaba el Pacte, Madrid habría presupuestado los otros proyectos que ha dejado fuera (Ronda Sur de Ciutadella, Arenal-Llucmajor y las variantes de Llucmajor e Inca) de haber sido supervisadas y validadas por Madrid.
Todas estas obras, iniciadas tras la vuelta del PP al Govern de Balears el pasado año, estaban previstas en el convenio del 98, que son las que debería financiar el Gobierno con cargo a los Presupuestos de 2005. Antich y Quetglas desmintieron a la consellera Mabel Cabrer, que insiste en que estas obras tenían el aval de Madrid, y precisaron que «es como si nunca se hubieran iniciado». Fue en este punto cuando Antich señaló que esta situación podría repetirse en los proyectos del convenio firmado entre Cabrer y el ministro Alvarez Cascos. Indicó que ya están en marcha obras que, según el convenio, no deberían licitarse hasta 2006 (como la de Palma a la UIB) o 2007 (como la de Palma Nova a Peguera) y que «ya están pensando en inaugurar». Indicaron que este modo de actuar «pone en riesgo las finanzas de la Comunitat Autònoma» y que el Govern puede verse en un «gravísimo problema» cuando intente cobrar. «Entre televisiones que nos van a costar muchísimo dinero y carreteras que les van a obligar a endeudarse, van a crear un problema muy grave», dijo Quetglas quien (al igual que Antich) recordó que «nosotros ya avisamos que eso podía ocurrir, que Cabrer no podía licitar obras por su cuenta, algunas con deficiencias, porque se estaba saliendo del convenio».«Nosotros -preciso Francesc Antich- no estamos diciendo que el Govern balear no tenga competencia para hacer carreteras, lo que advertimos es que se salen de los establecido en el convenio». Ante esta situación, indicaron, lo que debería hacer el Govern de Balears es «sentarse y negociar». Quetglas añadió que si Mabel Cabrer no es buena interlocutora, Jaume Matas deberían nombrar a otra persona para la Conselleria. «Menos chulería y más diálogo», resumió Antich.