El Ajuntament de Palma impulsará y apoyará, a partir del próximo año, itinerarios comerciales específicos, sobre todo aquéllos que estén especialmente preparados para que las personas con movilidad o capacidad de comunicación reducidas, o con disminuciones físicas temporales o permanentes, o con discapacidades sensoriales, o simplemente mayores, o que paseen con coches para niños, puedan acceder sin ningún tipo de dificultad ni de impedimento a cada uno de los comercios de una determinada zona comercial de Palma, al carecer todos los establecimientos de la misma de barreras arquitectónicas o de otro tipo, bien porque las hayan eliminado previamente o bien porque desde su puesta en funcionamiento ya hayan aplicado el nuevo reglamento de supresión de barreras arquitectónicas.
La iniciativa será impulsada por la Regidoria de Serveis Socials, que dirige la popular Margalida Ferrando, y por la Regidoria de Treball, Economia i Comerç, que dirige el popular Sebastià Sansó, que también preside el Institut Municipal de Formació Ocupacional i Feina (IMFOF). Ambas Concejalías se pondrán en contacto con las patronales Afedeco y Pimeco para que, si es su deseo, puedan hacer sus propias propuestas o incorporarse a esta nueva iniciativa. Así lo dio a conocer ayer el nuevo gerente del IMFOF, Joan Ignasi Morey.
Morey recordó, por otra parte, que sigue en marcha la campaña «Comerç sense barreres 2004», pensada para que los bares, cafeterías o restaurantes que quieran y puedan eliminar sus barreras arquitectónicas antes del 31 de diciembre de este año cuenten con subvenciones del Ajuntament, en concreto, de un 100 por cien en la realización del estudio previo para mejorar la practicabilidad del establecimiento y de un 50 por cien del coste de las obras de adaptación, hasta un máximo de 3.500 euros. El plazo para presentar solicitudes de ayuda termina el próximo 29 de octubre.