EUROPA PRESS/PALMA
La Conselleria d'Agricultura i Pesca cubrirá el 30 por ciento de
las inversiones destinadas a la mejora de las granjas de Balears
afectadas por insuficiencias en materias medioambiental y sanitaria
de los animales, con el objetivo de adecuarlas a la normativa de la
Política Agrícola Común (PAC) de la Unión Europea, mientras que el
70 por ciento restante será aportado por los ganaderos propietarios
de estas explotaciones agrarias.
Tras la firma de un convenio de colaboración entre la Conselleria y los Colegios de Ingenieros Agrónomos y de Veterinarios, la consellera de Agricultura, Margalida Moner, señaló que dentro de unas semanas el departamento de Agricultura llevará a cabo un análisis personalizado en cada una de las explotaciones que lo soliciten a fin de estudiar la situación en la que se encuentran actualmente y los problemas que puedan presentar, para plantear las soluciones adecuadas y concretar el presupuesto que conllevarán estas adaptaciones.
Moner aclaró que a esta iniciativa pueden acogerse los ganaderos que estén interesados ya que, dijo, «no obligamos a nadie ni somos intervencionistas», aunque declaró que la medida «más recomendable» es que estos trabajadores acepten la propuesta de la Conselleria, porque «adaptarse a la normativa de la UE va en beneficio del sector agrario». «Siempre estaremos al lado de los ganaderos para lo que necesiten, por lo que nuestras ayudas económicas serán fundamentales», afirmó.
El responsable del Colegio de Ingenieros Agrónomos, Ramón García, dijo que este proyecto ha sido fruto de un trabajo «arduo y difícil» realizado a lo largo de los últimos meses mediante reuniones con la Conselleria, y destacó la necesidad de evaluar cada una de las granjas de las islas a nivel individual para asignar la cantidad económica pertinente y aplicar las medidas necesarias. «Esta medida permitirá mejorar la calidad de las explotaciones agrarias de acuerdo con los parámetros establecidos por la PAC».