ALBA GONZÀLEZ
Las calles del Casc Antic de Palma han sido fuente de muchos
accidentes de los ciudadanos a causa de agujeros en las aceras,
caída de árboles o desniveles pronunciados. Aunque no todos los que
suceden son diligencia de la administración pública, la mayoría
acaban en una denuncia o reclamación contra el Ajuntament.
Durante los últimos tres años, el Consistorio ha recibido unas 1.500 quejas por accidentes en las calles, de las cuales sólo un 2% acabaron en los juzgados.
EL Ajuntament intenta solucionar estas quejas por vía amistosa, ofreciendo una compensación a los afectados, para así no acudir al Juzgado. No todos los ciudadanos que sufren un accidente de estas características reclaman sus derechos al Consistorio, habitualmente por desconocimiento.
Normalmente, un ciudadano que quiera denunciar unos hechos de este tipo tiene que dirigirse al Ajuntament rellenar una reclamación administrativa, donde tienen que constar sus datos personales, el lugar del accidente, y la narración del hecho. Además, el Ajuntament pide la presentación de un informe médico de donde pueda analizarse la gravedad de las heridas o de los daños materiales o psicológicos, y una fotografía que identifique el lugar del accidente. Después de eso, se da el plazo de un mes con el fin de hacer las comprobaciones y los procesos necesarios para decidir la compensación.
Los técnicos municipales, a la vista de la reclamación, inician la oportuna investigación para comprobar la veracidad de la denuncia, porque ante la cuantía de las indemnizaciones ha habido casos en los que se han simulado accidentes.