Unas 400 personas, 350 según la Polícia Local y más de 500 según los organizadores, participaron ayer en la manifestación convocada por las federaciones de hostelería de UGT y CCOO con la intención de «exigir» al Govern balear medidas urgentes «contra la estacionalidad turística» y pidiendo la apertura de los hoteles también en invierno.
La participación no cumplió las expectativas de los organizadores, aunque públicamente alegaran que «el número no es lo importante», según palabras de Antonio Copete, máximo responsable de la federación de hostelería de la UGT; si bien, previamente tanto Lorenzo Bravo (UGT) como Josep Benedicto (CCOO) habían reconocido que probablemente había faltado tiempo para informar a los trabajadores de la protesta y que «quizás el mensaje no ha calado en los trabajadores» dijo Lorenzo Bravo.
La marcha partió sobre las 16.40 horas del Auditorium, acompañados los manifestantes con la música de 'Rasputín' y acabó ante el edificio del Consolat de la Mar, sede del Govern, donde los participantes gritaron consignas como «Queremos hoteles abiertos todo el año», «Más soluciones, no especulaciones», «Matas si vols anar de putes paga amb els teus doblers» o «Contra la especulación huelga general».
Los secretarios generales de CCOO y UGT, José Benedicto y Lorenzo Bravo encabezaron la marcha con una pancarta en la que se podía leer «No al cambio de usos. ¡Por el empleo también en invierno!», acompañados de los responsables de hostelería de las centrales, Rafel Borrás y Antonio Copete, junto con Paco Domínguez, miembro de la federación estatal de hostelería de la UGT, y seguidos por los ediles del Ajuntament de Palma, Antoni Roig y Eberhard Grosske.