El presidente de la Federación Hotelera de Mallorca, Pere Cañellas, afirmaba ayer que «la evolución positiva de los niveles de ocupación en agosto (94'9%), un 2'5 por ciento más respecto al pasado año, se ha debido a la mejora de los ratios de comercialización, que han sido los mejores de los últimos cinco años. Y lo más positivo es que agosto se ha vendido sin ofertas, lo mismo que las primeras semanas de septiembre, que presentan una tónica similar en cuanto a niveles de ventas. Esta situación podría provocar que se atrasase el cierre de los hoteles en el final de temporada por el efecto de las ventas de último momento».
Cañellas afirma que si en mayo, junio y primera quincena de julio no se cumplieron las previsiones, «en el resto de la temporada se han superado, puesto que no esperábamos una respuesta tan positiva de los mercados emisores, en especial en septiembre, donde las ventas de último momento están motivando un alza de los niveles de ocupación».
El conseller de Turisme, Joan Flaquer, se mostraba ayer satisfecho por el comportamiento de la actividad turística en agosto y en septiembre, meses en los que las ventas de último momento en el Reino Unido, Alemania, España, Italia, Francia y países del Este. «La ocupación hotelera en agosto ha sido superior a la del pasado año y lo mismo está pasando en septiembre. Las previsiones para la segunda quincena de este mes y octubre, en principio, también son positivas, por lo que el final de la temporada alta está siendo positivo, pero habrá que esperar al balance final para ver el impacto global en todos los indicadores».
La Asociación Hotelera de la Platja de Palma, en este análisis del comportamiento de la temporada, presentó los datos de ocupación y rentabilidad de agosto, registrando una ocupación del 93'92%, dos puntos más respecto a agosto de 2003, según explicó el presidente de los hoteleros de esta zona, Jordi Cabrer.Las previsiones para septiembre son también positivas, circunstancia que afectará a una mejora de los ratios de rentabilidad, que han ido mejorando de forma paulatina en beneficio de la actividad empresarial.