RUIZ COLLADO/AGENCIAS
El conseller de Turisme y portavoz del Govern, Joan Flaquer, y el
presidente de la Federación Hotelera de Mallorca, Pere Cañellas,
mostraban ayer su satisfacción por el cambio de estrategia y de
actitud del Gobierno central sobre el modelo de sol y playa en
nuestro país, puesto que tras las declaraciones de los ministros
José Montilla y Cristina Narbona afirmando que dicho modelo «está
caducado» y «obsoleto», el secretario General de Turismo del
Ministerio de Economía, Raimon Martínez Fraile, aunció que «el
turismo de sol y playa no está obsoleto».
Martínez Fraile apunta que este tipo de turismo es «fundamental para España, donde nuestra oferta es la mejor de Europa y posiblemente del mundo. El turismo de sol y playa no está obsoleto, pero es necesario complementarlo mejorándolo, es decir, darle mayor amplitud y contenido».
Y este punto, señala que la promoción consiste en resaltar que los destinos de sol y playa cuentan también con una oferta complementaria que puede ser cultural, de ocio, deporte o naturaleza, por lo tanto no se trata «de inventar nuestra oferta, sino de mejorarla y darla a conocer».
Mala imagen
Para el conseller Flaquer, estos desacuerdos existentes en el
Gobierno central, «crean mala imagen, más aún cuando el modelo
turístico que critican es el que sustenta la actividad económica de
la práctica totalidad de las zonas turísticas de nuestro país. Está
bien que hayan rectificado, porque no tenía sentido alguno la
estrategia en que había entrado la Administración central».
Y Pere Cañellas considera que tanto Montilla como Narbona «se han hecho eco de una frase hecha, por lo que nos alegra que la Secretaría General de Turismo rectifique, puesto que el turismo de sol y playa está más vivo que nunca, como lo prueba el hecho de que millones de personas elijan dicho modelo para pasar sus vacaciones, no sólo en nuestro país sino en todos los destinos turísticos de la cuenca mediterránea».