El president del Govern, Jaume Matas, aseguró ayer que el Ejecutivo tiene otras alternativas a la conexión por cable con la península en caso de que la Generalitat se oponga a que éste arranque desde la central eléctrica de Vandellós. Tras mantener la reunión con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, a preguntas de los periodistas el president negó que la decisión de acudir a la reunión sobre la eurorregión que promueve Maragall sea una contrapartida al visto bueno de la Generalitat a la conexión eléctrica entre Balears y la península.
En cualquier caso, con respecto a este asunto, el president del Govern consideró que sería «un error» que la Generalitat de Catalunya no aceptara la petición del Govern y se negara a esta conexión. El president consideró que la mejor opción, desde el punto de vista técnico, es Vandellós, pero precisó que esta propuestas «no es imprescindible» ya que el Govern maneja «otras alternativas».
Una de las opciones que se manejó en su momento es que la conexión eléctrica para el cable parta de algún punto de la costa de Castellón, en la comunidad valenciana, y llegue a Mallorca por la zona de Santa Ponça. No se descarta que ésta sea la alternativa que maneja Matas, gracias a las buenas relaciones que existen entre el Govern balear y el de la Generalitat valenciana.El president explicó además que, en el transcurso de su reunión con Zapatero, le expresó la preocupación del Govern ante la posibilidad de que el Ministerio de Medio Ambiente desvíe las inversiones que debían destinarse a las cuatro desaladoras de Balears a otros proyectos de la costa levantina, como consecuencia de la modificación del Plan Hidrológico Nacional.