El Juzgado de Primera Instancia número 17 de Palma ha condenado al BBVA a indemnizar con 18.688 euros más intereses y costas a un ciudadano de Balears al que le vendieron un producto financiero denominado «contrato financiero atípico» sin informarle debidamente de sus altos riesgos, que le generaron unas pérdidas del 43 por ciento de la inversión inicial.
El delegado de la Asociación de Usuarios de Servicios Bancarios en Balears, Ausbanc, Carlos Hernández, explicó que tanto el BBVA como Banesto vendieron entre 1999 y 2001 unos 50.000 o 60.000 «contratos financieros atípicos» en España, un producto de ahorro que las entidades financieras «enmascaran» como un depósito a plazo fijo con un interés atractivo, aunque en realidad «esconde una opción financiera con la que las entidades se cubrían ante posibles bajadas de cotizaciones de las acciones que ellas mismas poseían».
En el caso que ha originado esta sentencia, los clientes depositaron 36.000 euros (seis millones de pesetas) en un producto que estaba referenciado a acciones de Telefónica y que ofrecía un interés del 8 por ciento. La cotización que sirvió de referencia fue la del 29 de enero del año 2000 (27,17 euros) por lo que el importe alcanzó para 1.327 acciones.
Al vencer del contrato, el 9 de agosto de 2002, las acciones se cotizaban a 9,53 euros, por lo que el BBVA devolvió 1.327 acciones de Telefónica que ese día valían 12.646.31 euros, más 7.741,96 euros en intereses abonados, por lo que el demandante incurrió en unas pérdidas de 15.672 euros, (2.607.276 pesetas), el 43 por ciento de la inversión inicial.