A punto de finalizar el verano, y cuando los creíamos lejos de la Isla, van y reaparecen. El rey don Juan carlos, su hijo, don Felipe, y su nuera, doña Letizia, salieron a cenar a La Cuchara, en pleno Passeig Mallorca palmesano. Cena distendida que se prolongó hasta pasada la medianoche. Los fotógrafos y los escoltas apostados en los alrededores del restaurante no pasaron desapercibidos entre la gente que iba y venía o que tomaba copas en las terrazas próximas. ¿Quién es? ¡Qué pasa?, preguntaban.
Aparte de la salida a cenar, la noticia de la noche estuvo en que don Felipe se había rasurado la barba. Como no podía ser de otro modo. A punto de concluir las vacaciones y también en plena recta final de la luna de miel, hay que pensar en el trabajo que se avecina, que es mucho. Así que, barbas fuera. La imagen de siempre se impone. Ya lo decía yo ayer. Que se rasuraría un día de éstos. Así que la barba de Matas puede tener también los días contados.
¿Que qué cenaron? Pues de entrada una abundante picada para los tres, seguida de un segundo plato. Ella optó por un foie de ternera lechal, mientras que ellos se decantaron por una suculenta carne roja servida con abundante ensalada. El vino fue un Luis Cañas y el postre una tarteleta fina de ciruelas calientes que disfrutaron entre los tres. Tras una corta sobremesa, y sobre las doce y media, los tres decidieron poner rumbo a casa. Antes de abandonar el restaurante saludaron a la primera mujer del ex beatle John Lennon, Cintya, que acudió a cenar al mismo lugar con su esposo, su hijo, Julian Lennon, y otros acompañantes, y a Fernando Dameto y a su esposa.
Pedro Prieto