JOSEP MARIA AGUILO
La regidora de Sanitat i Consum del Ajuntament de Palma y
presidenta de la Empresa Funerària Municipal (EFM), la popular
Marina Sans, dio a çconocer ayer que la EFM está preparando en
estos momentos un convenio de colaboración con otras empresas de
Mallorca que «permitiría acabar con la polémica surgida en estos
últimos meses con algunas funerarias municipales de otras
poblaciones de la Isla sobre qué servicios pueden prestar en
Palma».
El acuerdo sería firmado con la Associació d'Empreses Funeràries de Balears y pondría fin a una situación de conflicto que, en sus orígenes, se remonta a principios de los años noventa.
«Considero necesario llegar a un acuerdo satisfactorio por ambas partes cuanto antes, ya que no tiene sentido que en momentos tan delicados para tantas familias, tenga lugar una discusión entre empleados de distintas funerarias sobre qué competencias tiene cada uno», destacó Sans.
El convenio de colaboración que se está preparando permitiría que las empresas funerarias municipales ubicadas fuera de Palma pudieran realizar todos los servicios que normalmente llevan a cabo en sus puntos de origen también en la capital balear, bajo ciertas condiciones.
Cabe recordar que hace unos doce años surgieron las primeras diferencias, cuando las funerarias de los pueblos de Mallorca sólo podían recoger a los difuntos fallecidos en Palma, pues el arreglo de los mismos, denominado «enferetrar», y el posterior acondicionamiento, sólo lo realizaba la EFM. Así quedó recogido, años después, en 1998, en la nueva ordenanza funeraria municipal del Consistorio palmesano, que sería recurrida por varias funerarias de la Part Forana. La sentencia subsiguiente supuso una nueva causa de enfrentamiento, ya que las dos partes afectadas entendieron que se les daba la razón.