Las Sex Bomb están en Palma. Ayer por la noche animaron con su presencia la inauguración de la discoteca Caramelos, en el Paseo Marítimo, y luego amenizaron parte de la celda cantando su último éxito «Si llama dile que he salido». Aunque dicen que el grupo es una democracia, nadie duda que Sonia Monroy es su líder. Lleva muchos años en el mundillo artístico, tantos que debutó a los cuatro años en el Liceo de Barcelona -«mi padre era tenor», recuerda orgullosa-, aunque se dio a conocer bastante después bailando en «esta noche cruzamos el Mississipi».
Confiesa que la canción está pegando muy bien, y que por ello, «en otoño nos vamos a Japón de gira». Enemiga irreconciliable de Malena Gracia y Yola Berrocal, ex componentes del grupo, no le gusta hablar de ellas «pues es hacerles publicidad», aunque reconoce que Malena, sobre todo, gana dinero yendo detrás de ella. «Yo no quise ir a un Dia a día, y la mandaron llamar a ella. Este verano ella tiene 15 galas que nosotras no quisimos. Ya digo, gana dinero yendo detrás de nosotras, puesto que lo que rechazamos se lo dan a ella».
Asegura que lo suyo es anatomía casi pura, «pues sólo me he operado una vez. Y ha sido suficiente, ¿no? En cambio otras, ya las ves...». Le preguntamos si no les da envidia el lío que dice que ha tenido la Bermúdez con Beckam, a lo que contesta otra componente del grupo, Sandra: «Para mí que con quien ha tenido un lío ha sido con el guardaespaldas, no con Beckam. Pasa que a algunas les gusta mucho hablar más de la cuenta».
Pedro Prieto