TORRES BLASCO/EFE
Las administraciones públicas (Govern balear y Gobierno central)
van de la mano en una cuestión: la necesidad de fomentar el sistema
de alquiler y facilitar el acceso a la vivienda, sobre todo de los
jóvenes. El Ejecutivo balear aprobó ayer una serie de medidas
complementarias al plan estatal que prevé subvenciones a la
remodelación de viviendas que luego se alquilen y a la subvención
de inquilinos.
Fue uno de los acuerdos del Consell de Govern, pero hubo otros, como el que pondrá en marcha el inicio de las expropiaciones para el soterramiento de las vías del tren. En relación a las viviendas, el Ejecutivo dio vía libre a un decreto que prevé la aportación de hasta 9.000 euros de subvención para la rehabilitación de viviendas destinadas al arrendamiento y estipula un máximo de 2.880 euros anuales de ayuda al alquiler de un piso para personas que tengan una renta inferior a 15.792 euros.
El portavoz del Ejecutivo, Joan Flaquer, comunicó en la rueda informativa posterior al Consell de Govern que podrán beneficiarse de las ayudas para arrendar un piso las personas que acrediten un mínimo de cinco años de residencia en Balears y especificó que las subvenciones no podrán exceder del 40 por ciento del alquiler anual.
La Conselleria d'Obres Públiques, en función de las solicitudes que reciba, restringirá las ayudas a colectivos concretos, entre los que dará prioridad a los jóvenes menores de 35 años. Las ayudas para la remodelación de viviendas destinadas al alquiler están limitadas a las que tengan una superficie inferior a los 120 metros cuadrados, que deberán ser arrendados durante un mínimo de cinco años.
De los 9.000 euros a los que asciende la ayuda máxima en este apartado, 6.000 euros corresponden al plan nacional, a los que la Conselleria d'Obres Públiques, Vivenda i Transports ha añadido una subvención complementaria de hasta 3.000 euros. El portavoz del gobierno destacó que con la aprobación de este decreto el Ejecutivo autonómico pretende mejorar el mercado de la vivienda y facilitar el acceso a un piso por parte de los jóvenes.
Estas ayudas incluyen tanto la eliminación de las barreras arquitectónicas efectuadas por los propietarios o arrendatarios de las viviendas, como las obras que se efectúen en las comunidades de propietarios para mejorar la accesibilidad de un edificio.
El soterramiento
En su reunión de ayer, el Ejecutivo también aprobó el anexo de
expropiaciones de los proyectos de soterramiento de las vías del
tren y de la construcción de la futura estación. El acuerdo de ayer
supone la declaración de urgente ocupación de los terrenos. Según
el Govern, el soterramiento de las vías ferroviarias y la creación
de la estación intermodal supondrán «un gran cambio para la ciudad»
y serán una «apuesta decidida por el fomento del transporte
público», al que se dotará de mejores y más modernas
instalaciones.
Además, las zonas hasta ahora separadas por las vías del tren volverán a estar unidas, lo que ofrecerá mayores posibilidades a los viandantes y al tráfico rodado. Soterrar las vías del tren a su paso por Palma supondrá una inversión de 89,6 millones de euros, debido a la inclusión en el proyecto de un aparcamiento subterráneo en el Parque de las Estaciones, a un nivel inferior de la futura estación intermodal.
La iniciativa no sólo contempla el soterramiento de las vías del tren de Inca desde la plaza España hasta la Vía de Cintura y del apeadero de Son Oliva, sino también la construcción de un estación subterránea en el Parc de ses Estacions para trenes y autobuses, con 10 vías ferroviarias y 5 andenes. En relación a este asunto, el comité de empresa del SFM se sumó a las críticas de otros colectivos, entre ellos el de los arquitectos, y reclamó un concurso de ideas antes de poner en marcha el proyecto. El comité de empresa calificó de «faraónica» la propuesta y concluyó que más que soterrar el tren, servirá para «enterrarlo».