La cantidad exacta de hachís que intervinieron el pasado viernes en Alcúdia y Son Servera los agentes del Àrea Operativa de Vigilancia Aduanera es de 2.495 kilogramos. Esta cantidad supone 728.000 euros a precio de mayorista y que, una vez adulterada la droga, supondría cifras superiores a los tres millones de euros en el 'mercado negro'. Pero lo más llamativo, quizá, además de la importancia de la operación y del hachís intervenido, es la confirmación de que la Isla es un 'lugar de paso' de la droga para grandes organizaciones internacionales. Las obras de prolongación de las tres autopistas de Mallorca, desechadas por el Pacte de Progrés han comenzado a pesar de las protestas de formaciones conservacionistas. La primera en iniciarse fue la autovía s'Arenal-Llucmajor. El proyecto, que se desarrolla a un buen ritmo, prevé el desdoblamiento de los 8'5 kilómetros de carretera entre s'Arenal y Llucmajor y su reconversión en autovía, tiene un coste de 30'3 millones de euros y estará concluida en 2005. Tendrá una mediana de 12 metros.
Esta obra se desarrolla de forma paralela a la variante de Llucmajor, que comienza donde acaba la autovía en Son Noguera y concluirá 6'3 kilómetros después en el cruce con la carretera de Campos. Esta nueva carretera, que costará 25 millones, desviará del centro de la localidad un tráfico diario de entre 20.000 y 30.000 coches.
El Govern también ha iniciado la autovía Palmanova-Peguera, que tendrá un presupuesto de 49'3 millones de euros y estará terminada en mayo de 2006. El proyecto prevé la duplicación de calzada entre Palmanova y Peguera, salvo en un tramo de 1'2 kilómetros de los 9 de la autovía. La carretera tendrá una mediana de 2 a 4 metros.
La autovía Inca-sa Pobla, sin duda el proyecto más polémico de las tres vías rápidas que afecta a una zona declarada Bien de Interés Cultural (BIC) y que ha sido denunciada por el GOB ante la Fiscalía, también está en marcha. La autovía tendrá una longitud de 10'7 kilómetros, costará 49 millones de euros y estará acabada en enero de 2006.
Esta obra también se desarrolla de forma paralela a la variante de Inca, que está en obras desde febrero pasado. La prolongación de la autopista por el sur de Inca tendrá una longitud de 5'5 kilómetros y contará con una mediana de 12 metros. El proyecto, que tendrá cuatro pasos superiores y 3 enlaces, costará 24'9 millones. Otro proyecto importante es el tercer carril de la autopista de Inca. Obres Públiques ha iniciado la primera fase de 4'6 kilómetros desde Palma al centro comercial Alcampo. La obra prevé la creación de una rotonda en la intersección de las calles Eusebio Estada y 16 de Julio para aliviar el tráfico en el acceso al polígono de Son Castelló.
Aunque el protagonismo en materia de carreteras lo tendrá el Govern esta legislatura, el Consell también quiere participar con la ejecución del desdoblamiento de la carretera de Manacor, un proyecto reivindicado por todos los municipios afectados. Las obras, que comenzaron el mes pasado, tienen un plazo de ejecución de 27 meses y costarán 107 millones de euros. La duplicación de calzada afectará a 40 kilómetros desde sa Síquia de Palma hasta Manacor. Tendrá 12 enlaces a diferente nivel y 4 rotondas. La carretera de Manacor tiene en la actualidad un flujo de tráfico de 20.000 vehículos diarios y con el desdoblamiento se tardará entre 30 y 35 minutos en ir de Palma a Manacor. Aunque las obras no son de tanta envergadura como las anteriores, el Consell también ejecuta la mejora de las carreteras comarcales Inca-Llubí y Pòrtol-Santa Maria, unas obras muy importantes para los usuarios de esta zona.
En la primera el Consell invierte 5 millones de euros y el adecentamiento de la vía se llevará a cabo hasta Santa Margalida. El Consell también proyecta iniciar a finales de año la mejora de la carretera desde sa Pobla a la localidad de Alcúdia.