El teniente de alcalde de Medi Ambient del Ajuntament de Palma y presidente de Emaya, Antoni Nadal, dio a conocer ayer que en las zonas en donde ya se han instalado «caniparcs», 8 en total, las quejas de los ciudadanos provocadas por la presencia de excrementos en las calles han disminuido, de media, un 60%.
«Estos datos confirman el buen funcionamiento de esta iniciativa, aunque no hay que olvidar tampoco la labor que están llevando a cabo desde hace tiempo los controladores medioambientales en los diferentes barrios de Ciutat», destacó Nadal.
Los «caniparcs» son parques pensados para que los perros puedan jugar en ellos. En su interior hay «pipicans» y «sanecans», además de diversos árboles. El primer «caniparc», ubicado en es Molinar, fue inaugurado de manera oficial el pasado 23 de marzo. En un principio, la intención de Emaya era colocar 20 de de estas instalaciones durante el mismo mes de marzo. No obstante, «por dificultades técnicas», finalmente se han ido construyendo de forma mucho más pausada, por lo que su puesta en marcha se prolongará a lo largo de este año. «A finales de 2004 ya estarán instalados los 20 'caniparcs' previstos», señaló el presidente de Emaya.
Nadal indicó que las previsiones de la empresa municipal son continuar con esta iniciativa a lo largo del próximo año. «Nuestra intención es que en un futuro cada barriada de Palma cuente con una o varias de estas instalaciones», afirmó.Cada «caniparc» tiene una extensión mínima de cuarenta metros cuadrados y cuenta con vallas de protección y carteles alusivos a cómo cuidar del mejor modo posible estas mascotas.
Estos espacios son instalados en solares o zonas verdes de titularidad municipal, que el Ajuntament de Palma cede a Emaya.