La Conselleria de Salut i Consum ha puesto en marcha la campaña 'Estiu amb salut' con un programa orientado a la prevención de las patologías propias del verano y al establecimiento de los recursos sanitarios necesarios para hacer frente a las altas temperaturas, aunque los meteorólogos prevén un verano menos caluroso que el pasado.
De esta forma, y teniendo como eje principal la prevención, el refuerzo asistencial y un sistema de información y vigilancia, este programa presentado ayer por la consellera de Salut i Consum, Aina Castillo, tratará de reducir los efectos nocivos sobre la salud asociados a los meses de más calor.
La prevención se realizará mediante campañas de información, con un coste aproximado a los 20.000 euros, destinadas a la población de riesgo -enfermos crónicos, niños y mayores de 65 años- y a la población en general. Tal y como explicó Antoni Pallicer, director general de Salut Pública i Participació, es muy importante el tomar medidas preventivas frente al calor como el «consumir más líquidos, reducir la actividad física, evitar las comidas copiosas y utilizar ropa fresca», entre otras medidas.