El control de la contaminación atmosférica de Palma a través de las dos estaciones instaladas por la Conselleria de Medi Ambient en la esquina Avingudes-carrer Manacor y en el bosque de Bellver no arrojan ningún resultado que se acerque a los límites que suponen un riesgo para la población. Las compuestos químicos que se analizan son el dióxido de nitrógeno, el dióxido de azufre, el nivel de partículas en suspensión, el monóxido de carbono y el ozono. La Direcció General de Qualitat Ambiental dispone de datos actualizados cada 15 minutos y transmite las medias diarias al Ajuntament de Palma, que las expone en sus paneles informativos.
Según los datos de Qualitat Ambiental, la calidad del aire se mantiene en unos niveles notablemente inferiores a los límites a partir de los cuales puede surgir un riesgo para la salud de la población. Cabe destacar que una estación está ubicada en un punto de denso tráfico de vehículos (Avingudes-Manacor), mientras que la otra está instalada en una zona boscosa de la periferia de Palma (Bellver).
Otra cuestión a tener en cuenta es que los niveles de ozono, que en las capas de la atmósfera más próximas a la superficie terrestre puede causar problemas respiratorios, presentan puntas en Bellver superiores a las del centro de la ciudad. Ello se debe a la acción desplazadora del viento. También hay que tener presente que en los países mediterráneos, por la radiación solar, los niveles de ozono suelen ser superiores a los de los países nórdicos.