Balears registró ayer un récord de abstención y se convirtió en la segunda comunidad autonónoma con el peor índice de participación electoral. Con una abstención del 62,15 por ciento, Balears sólo fue superada por Canarias, donde el 63,09% de los votantes no acudieron a votar. A la vez, estas dos comunidades sólo fueron superadas en abstención por las ciudades autonónomas de Ceuta y Melila, donde más del 67 por ciento del electorado dejó de votar. Sólo 259.233 personas votaron ayer.
La abstención en Balears ha sido mucho más alta que la registrada en el cómputo nacional, donde el 54,06 por ciento del electorado ha dejado de votar. Por detrás de Canarias y Balears se sitúan, por este orden, Cataluña, Andalucía y Navarra, aunque en esta última comunidad la participación ha sido casi 10 puntos superior a la registrada en las Islas. Si se compara el índice de participación de estas elecciones con los últimos comicios, la diferencia del índide de abstención es abismal, aunque en aquella ocasión se celebraron también municipales y autonómicas.
Es decir, los electores depositaron, a la vez, las papeletas para las europeas, municipales y autonómicas, lo que se tradujo en un incremento de votantes para elegir a los eurodiputados. En cualquier caso, en las anteriores europeas dejaron de votar el 43,01 por ciento de los electores, es decir, la diferencia de participación es de 19 puntos.
Si se compara la participación de estas elecciones europeas con las celebradas hace diez años, la abstención también es muy superior. En el año 94 únicamente se celebraron elecciones europeas, pero la abstención fue del 50,22 por ciento. En cambio, la participación en las primeras elecciones celebradas en 1987 fue histórica y la abstención en Balears apenas fue del 33,24 por ciento. En las europeas celebradas dos años después, el electorado de Balears volvió a demostrar desinterés por las europeas.