Las empresas agroalimentarias de Balears cuyos productos están englobados en algún tipo de distintivo de calidad o indicación geográfica facturaron durante el año pasado 52,5 millones de euros, un 13,54 por ciento más que en el año anterior, según anunció ayer la vicepresidenta del Govern y la consellera de Agricultura y Pesca, Rosa Estaràs y Margalida Moner, respectivamente.
El producto más vendido durante el año pasado fue la sobrassada integrada en la indicación geográfica protegida de Mallorca, ya sea la de cerdo blanco o negro, en cuyo consejo regulador están inscritas 44 industrias de la Isla que produjeron 2,4 millones de kilos de este embutido, un 5 por ciento menos que en 2002, y facturaron 12,6 millones de euros, un 15 por ciento más que en 2002.
A continuación se sitúa la Denominación de Origen Queso de Maó-Menorca, en la que participan 140 ganaderías, 33 queserías artesanales, 5 industriales y 10 maduradores artesanales, cuyas ventas ascendieron a 12,61 millones de euros durante el año pasado, las mismas que en 2002.
Las dos denominaciones de origen mallorquinas: Binissalem y Pla i Llevant facturaron respectivamente 6,527 millones y 4,56 millones de euros durante el año pasado, lo que implica un decrecimiento del 14 por ciento para Binissalem y un aumento del 10 por ciento para Pla i Llevant respecto a las ventas obtenidas en el año 2002.Entre la producción de vinos, cabe añadir la comercialización de 458.0000 litros por parte de la los 11 viticultores integrados en la marca «Vi de la Terra de les Illes Balears», cuya facturación ascendió hasta los 3,167 millones de euros.