El arquitecto británico Richard Rogers diseñó el parque tecnológico Parc Bit asociado a un complejo residencial para 8.000 personas. El Govern de Francesc Antich prescindió del uso inmobiliario del área, de 1,8 millones de metros cuadrados, pero el nuevo inquilino del Consolat de la Mar, Jaume Matas, «evalúa» la posibilidad de recuperar la versión original del proyecto de Rogers. Con ello, según explicó ayer en rueda de prensa el prestigioso arquitecto inglés tras ser recibido en audiencia por Matas, «esa área conjugaría la zona residencial y la de trabajo», porque «si se desea desarrollar un sistema de equilibrio con el medio ambiente y el desarrollo sostenible, no se tienen que crear 'guetos' ni de zona de trabajo ni de residentes», afirmó.
Tras esa afirmación de Rogers intervino el portavoz del Govern de Matas para matizar que el Ejecutivo «no prevé variar el actual uso del Parc Bit para convertirlo en zona residencial». Por ahora, el Parc Bit cuenta con un edificio central -Ses Cases de Son Espanyol-, otro inmueble situado en la parcela 17 que ya está en funcionamiento, un centro de telecomunicaciones, una planta de cogeneración energética y un centro tecnológico del turismo.
No es la primera vez que Rogers defiende la idea de un Parc Bit «para trabajar, pero también para vivir». El prestigioso arquitecto británico, autor, entre otros proyectos, del Centro Pompidou de París y del Millennium de Londres, insiste que el Parc Bit fue también diseñado para vivir. Considera «muy importante» que el Parc Bit cumpla la doble condición de lugar de trabajo y de residencia. «Si se convierte en únicamente un centro de oficinas, éste no es el sitio idóneo.