El ex president de la Generalitat de Cataluña, Jordi Pujol, se puso ayer del lado de Jaume Matas y de su Ejecutivo durante un acto de la campaña del PSM (una rueda de prensa) y afirmó que «la responsabilidad es del Govern de Cataluña» al responder a una pregunta sobre quien era el responsable de que el Govern balear decidiera abandonar el Institut Ramon Llull. Pujol consideró que aunque el Ejecutivo balear «no ha sido muy entusiasta» en su defensa del catalán y del Institut, tampoco parecía previsible que Balears lo abandonara.
«Lo lamentamos mucho», aseguró durante una rueda de prensa que dedicó mayoritariamente a expresar su preocupación por la televisión de Cataluña, por TV-3. Incluso bromeó al respecto. Cuando se le pregunto, tras la rueda de prensa, a qué dedicaba el tiempo desde que no era president, dijo: «miro TV-3». El núcleo central de su discurso sobre la televisión fue que ésta debe ser en catalán y de calidad, con publicidad privada y competitiva. «El modelo que querían los socialistas en el 82 era de una televisión con sólo informativos y cultura, sin series, sin fútbol, sin películas... que no fuera competitiva», afirmó.
Para Pujol, la televisión es una pieza básica para difundir y potenciar la lengua y consideró que el catalán debe ser la lengua vehicular. Dedicó varias «puyas» a ERC por este asunto. Por ejemplo, consideró que hacer una pregunta en catalán en el Congreso (sabiendo que el reglamento no lo autoriza) es «buscar un titular» y reprochó a Carod-Rovira (líder de ERC) que presuma de tener «la llave» del tripartito y que no sea capaz de controlar algunas propuestas y anuncios de sus socios.