El Govern, a través de Joan Flaquer, negó ayer que Balears viva una situación de crisis económica, reconoció que la situación es preocupante y recalcó que la tendencia es positiva. El portavoz del Ejecutivo y el conseller de Treball, Cristòfol Huguet, explicaron con distintos gráficos que la inmigración y la falta de confianza empresarial habían frenado un mayor crecimiento en la creación de empleo en Balears. «La demanda ha crecido más que el empleo», subrayó Huguet.
Joan Flaquer desmintió, además, que el president del Govern hubiese calificado de «crisis» la actual situación económica de Balears. «Lo que hay que analizar es qué ha ocurrido desde el año 2000», planteó Flaquer, en clara alusión a la gestión económica del Pacte. En este sentido, el portavoz del Govern recordó que cuando el PP estaba en la oposición ya advirtió que la situación económica no era buena.
«Nosotros hemos dicho lo mismo en el gobierno y en la oposición; hemos sido coherentes», subrayó. Para Flaquer, el empeoramiento del mercado laboral se debe, entre otras causas, a la «política de agresión al turimo» y al enfrentamiento del anterior Govern con los hoteleros.