El sueño de las fans incondicionales de Àlex Ubago se hizo realidad la noche del sábado en Manacor. Pasaban cinco minutos de la hora prevista para el inicio del concierto (22.35 h.) y se apagaron los focos. Un grito que parecía salido de una sola garganta tronó de entre el público justo en el momento en que comenzaban a sonar las notas de «Ahí estaré». Àlex Ubago surgió de entre el humo y tal cual es, sencillo y sin grandes alardes, encandiló a las 4.000 almas que habían pasado por taquilla.
La emoción no era para menos, las fans más fieles estaban en primera fila desde las once de la mañana y reclamaban a Àlex una muestra de caríño, una mirada, un guiño de complicidad para sentirse, por un sólo momento, las niñas de los ojos de su ídolo.
El cantante donostiarra interpretó lo mejor de sus dos discos: «¿Qué pides tú?» y «Fantasía o realidad». Temas como «Vuelve» o «A gritos de esperanza», enloquecieron al público. El concierto tuvo momentos estelares, como cuando, después del primer bis, sonó «Sin miedo a nada». Antes del concierto, las fans más afortunadas pudieron conocer al cantante y vivir unos minutos, para ellas milésimas, de un sueño.
A. Bassa/ J. M. Sastre