«Siam qui som», el polémico documento político de los socialistas de Palma que proponía la práctica refundación del partido en Balears para adaptarse a la estrategia de Zapatero y alejarse del nacionalismo -lo que entonces se definió como «más PSOE y menos PSIB»- es la baza de los críticos de la capital balear, concretamente de la agrupación de Ponent, para el congreso de la Federación Socialista de Mallorca (FSM).
Así se explican las razones por las que esa agrupación (que aporta 29 delegados al congreso insular y que controlan Ramón Torres y Joaquín Bellón) optó por no votar la gestión de Francina Armengol pero pedir la retirada de la ponencia política del congreso.
La estrategia, que ha llegado a confundir a otros críticos (ayer mismo, dirigentes críticos de Palma ya no incluían a los de Ponent como «suyos» en el recuento provisional de delegados) es fruto de una compleja negociación que todavía precisa de un capítulo más: que Joaquín Bellón oficialice la próxima semana que también él será candidato a la secretaría general de Mallorca. En Ponent, la mayor agrupación del partido en Balears, no se tiene la más mínima duda.
Bellón y su candidatura
Según las fuentes que han informado a este periódico, el documento
de la conferencia política de Palma era fundamental para reconducir
el partido en Balears y lograr una alternativa clara para las
autonómicas de 2007. Sin embargo, tras su aprobación, el «aparato»
de Mallorca decidió suspender la estructura del partido, anular sus
órganos de dirección y dejar a Palma en manos de una coordinadora
dependiente de la FSM.
El documento abogaba por abrir el partido a todos los sectores, por no hacer de la lengua una seña de identidad y quería dar mayor papel a afiliados y simpatizantes.
«Nuestro voto no está cautivo de nadie», dijo anteayer Joaquín Bellón. Y, ayer, lo repitieron otros dirigentes de Ponent que explicaron que esta propuesta será presentada tanto a Cánoves como Armengol, aunque sabiendo que ésta no lo asumirá.
«Es que nadie ha apoyado a Ponent desde entonces», dijo un militante destacado de esta agrupación que consideró factible obtener apoyos de Cánoves. Si no fuera así, Bellón presentará su candidatura. Los promotores de esta iniciativa señalan que varios de los delegados de las otras agrupaciones de Palma son suyos y que pueden arrancar votos en Calvià, Andratx y otros municipios. El sector oficialista confía asegurarse la mayoría sin contar con Ponent.