Las labores previas empezarán en septiembre, y consistirán en el desvío de las conducciones subterráneas de agua, gas y electricidad, y en la retirada provisional del popular puente creado por el arquitecto Gaspar Bennàzar hace un siglo, que conecta Eusebi Estada con Marquès de la Fontsanta. Desde ayer, el proyecto previsto se encuentra en periodo de exposición pública, para que se puedan presentar alegaciones para su mejora. El Ajuntament dispondrá de dos meses para hacerlo y los ciudadanos tendrán un mes. Dicho proyecto está ideado pensando en las necesidades viarias de los próximos 50 años. El proyecto actual prevé la construcción de la Estación Intermodal de Palma, en sustitución de la antigua estación central, que estará justo debajo del Parc de ses Estacions y que contará con una estación de tren con diez vías y cinco andenes, y con una estación de autocares con 30 plataformas. Cada hora podrán circular hasta 40 trenes por dicha estación gracias al corredor de cuatro vías que habrá hasta la Via de Cintura. Una de las novedades previstas ahora, no contempladas en un principio, será la construcción de un aparcamiento subterráneo de 400 plazas, que estará ubicado debajo de la estación intermodal.
Asimismo, está prevista la remodelación del Parc de ses Estacions, con un coste de 2'7 millones de euros, que ampliará su espacio ajardinado, pasando de 36.000 a 49.380 metros cuadrados. Además, se creará un bulevar peatonal de 18.000 metros cuadrados, que conectará ses Estacions con el Parc de Son Costa y el futuro Parc de Son Fuster. Tanto Cabrer como Cirer coincidieron en destacar que el soterramiento de las vías del tren representará el proyecto en infraestructuras más ambicioso de esta legislatura. La alcaldesa recordó, por su parte, que no será necesario modificar el Pla General d'Ordenació Urbana de Palma, y añadió que gracias al soterramiento podrán comunicarse seis barriadas de Ciutat que hasta ahora estaban separadas por las vías del tren: Son Oliva, Son Forteza, Plaça de Toros, Arxiduc, Marquès de la Fontsanta y Hostalets. En principio, sólo se llevarán a cabo 10 expropiaciones de terrenos, para conseguir que el trazado final del soterramiento sea lineal.
Por otra parte, Cirer, el alcalde de Llucmajor, el popular Lluc Tomàs, y el presidente de Creu Roja en Balears, Miquel Alenyà, firmaron ayer un convenio de colaboración para el control y seguridad en las playas de Ciutat. De este modo, un año más, las labores de vigilancia y socorrismo en las playas de Palma serán llevadas a cabo por Creu Roja, que contará con un presupuesto de 183.000 euros. La vigencia del convenio abarca desde el día de ayer hasta el próximo 7 de octubre. El horario será de 10.00 a 18.00 horas en temporada alta y de 11.00 a 17.00 horas en temporada baja. Alenyà recordó que el año pasado Creu Roja realizó 6.300 intervenciones en las playas de Ciutat.