La Empresa Municipal de Aguas y Alcantarillado (Emaya) califica de «bastante aceptables» las reservas hídricas para abastecer Palma de cara al verano, «por lo que no existe ningún problema en el suministro de agua potable a partir de junio».
Además de garantizar agua potable durante este verano, su calidad, hoy por hoy, es buena. En concreto, el agua que sale del grifo contiene 82 miligramos de cloruros por litro, cifra muy por debajo del límite establecido por Sanidad para su consumo, cifrado en 200 miligramos de cloruros, y algo superior a los 50 miligramos registrado en 2002, cuando se alcanzaron los niveles más bajos desde 1995. Fue entonces cuando Palma llegó a soportar niveles de 3.000 miligramos por litro.
La situación de los acuíferos de la Serra Nord «es también bastante buena, puesto que hoy por hoy se puede hablar de una buena recuperación de los niveles», afirman fuentes de Emaya.S'Estremera, por ejemplo, «se ha recuperado 83,12 metros desde que alcanzó su novel mínimo, lo que representa un 68,83 de recuperación con referencia al nivel de inicio de esta explotación en 1986. La salinidad del agua de s'Estremera se sitúa en los 55 miligramos de cloruro por litro».
En cuanto a Can Negret, «se ha recuperado 89,32 metros desde su nivel mínimo histórico, lo que representa un 81,70 por ciento de recuperación frente al nivel registrado en 1986». La salinidad de sus aguas se sitúan en 59 miligramos de cloruros por litro de agua.