Baleares, Navarra y Castilla y León fueron las comunidades autónomas que más puestos subieron en el ránking de las regiones españolas en PIB por habitante entre 1930 y 2000, mientras que el País Vasco y Asturias son las que bajaron más posiciones en esa clasificación.
Así se recoge en el estudio de Evolución Económica de las regiones y provincias españolas en el siglo XX, de Julio Alcaide para la Fundación BBVA, que incluye las listas de regiones en función de su riqueza por habitante en 1930, 1950, 1975 y 2000.
Según este análisis, Extremadura es la comunidad con menos PIB por habitante durante todo el periodo 1930-2000, mientras que la de las Illes Balears es la comunidad autónoma con más PIB por habitante desde 1975, seguida de Madrid.
Comunidades como Balears, Navarra y Castilla y León, ganaron tres puestos desde 1930 y Aragón y Galicia subieron dos posiciones. El País Vasco y Asturias fueron las que más descendieron, cinco puestos cada una.
El estudio refleja que el mayor crecimiento tuvo lugar en las autonomías con mayor población, aunque el desarrollo económico español fue generalizado en toda la Península. La tendencia de la población a concentrarse en el este y el sur peninsular ha presidido la expansión económica española.