El presidente de Emaya, Antoni Nadal, dio a conocer ayer que la mayor novedad del Plan de Servicios y Calidad de las Playas de Palma de este año será que habrá inspecciones diarias en cada una de ellas, realizadas por los controladores medioambientales, que cumplimentarán un cuestionario cada jornada con la intención de informar de las deficiencias que encuentren para que éstas puedan ser subsanadas de inmediato. Nadal destacó que los objetivos del citado plan son «velar por la seguridad de los usuarios, controlar la calidad sanitaria de las playas y mantenerlas en buen estado».
Un año más, las labores de vigilancia y socorrismo serán llevadas a cabo por la Cruz Roja, mientras que la limpieza de las playas se encomendará a las empresas concesionarias previamente contratadas por el Consistorio.
Nadal anunció que se construirá un nuevo puesto de socorro en la Platja de Palma, que tendrá un coste de 54.000 euros.
El presidente de Emaya añadió que en la costa habrá seis barcazas, que se encargarán de recoger los desperdicios y suciedad que sean encontrados en las aguas próximas a las playas, que en el término municipal de Palma son cinco: Cala Major, Ciutat Jardí, Cala Estància, Platja de Palma y Platja de Can Pere Antoni.