Pues finalmente hubo fumata blanca. Tras aceptar el presidente de la Cámara de Comercio las propuestas que le hizo Toni Yoh respecto al solar de 350.000 metros cuadrados en el que se puede levantar una fábrica de materiales de construcción, se firmó el preacuerdo para la adquisición del mismo por el periodo que marca la ley china de inversiones: 50 años. Así que por parte de la sociedad formada por los hermanos Rosselló, de Porreres, Manuel Rodríguez, de Son Servera, Guillermo Ballester, también de Porreres, y Toni Yoh, de Palma, rubricaron dicho precontrato estos dos últimos, mientras que Shi Ping, director de la Cámara de Comercio de Haimen, lo hacía en nombre del Gobierno chino.
Previamente, la delegación mallorquina tuvo que asegurarse de algunos puntos, a saber: si transcurrido el tiempo esta sociedad puede vender o traspasar el solar a terceros y si al adquirirla éstos pueden cambiar la utilidad del negocio. La respuesta de parte del representante chino fue afirmativa a ambos puntos. En lo referente a si esos terrenos podían quedar asegurados ante cualquier catástrofe de carácter natural (terremoto, inundación, etc.) por parte del Gobierno chino, la respuesta no fue afirmativa «aunque hagan lo que han hecho las otras compañías extranjeras que han invertido en este país: asegúrenlo de forma privada. Afortunadamente, hasta la fecha no hemos tenido ningún caso, pues no han ocurrido desgracias, pero si hay un seguro, y el Estado no pone inconvenientes a él, será éste quien responda ante las mismas».Al margen, Toni Yoh mostró su preocupación ante la posible falsificación de una marca de dicha fábrica, «o de otra empresa que más a delante a lo mejor montemos en otro lugar» por parte de los falsificadores chinos, «los mejores del mundo», matizó. La respuesta al respecto por parte de Shin fue contundente en su doble aspecto: desgraciadamente no podemos hacer nada en contra de estos falsificadores, aunque si se les denuncia, y se demuestra que lo son, el peso de la ley caerá sobre ellos».
Pedro Prieto (China)