El Castell de Bellver acogió ayer por la noche el acto de conmemoración del XXV aniversario de la celebración de las elecciones municipales de 1979 en el Ajuntament de Palma. Presidió el acto la alcaldesa de Ciutat, la popular Catalina Cirer, que estuvo acompañada, a lo largo de su intervención, por el ex alcalde socialista Ramón Aguiló, que gobernó en el Consistorio entre 1979 y 1991; por el ex alcalde popular Joan Fageda, que presidió la Alcaldía entre 1991 y 2003; por el candidato de UCD en las elecciones de 1979, Jeroni Saiz, que con posterioridad sería conseller con el presidente popular Gabriel Cañellas; y por el propio Cañellas, que fue el candidato de Coalición Democrática al Ajuntament hace 25 años. Cirer recordó que en 1979 se presentaron un total de 259 candidatos, de los cuales 210 fueron hombres y 49 mujeres. Hace 25 años resultaron elegidos 27 concejales -en la actualidad son 29-, repartidos del siguiente modo: 13 por UCD, 11 por el PSOE, 2 por el PCE y 1 por el PSM. El pacto entre estos tres últimos partidos posibilitó que en 1979 el alcalde de Ciutat fuese finalmente socialista, pese a la victoria del candidato centrista.
Si en 1979 había 24 concejales y 3 concejalas en Cort, en la presente legislatura hay 15 concejales y 14 concejalas. Cirer, que tuvo palabras de recuerdo para quien antecedió a Aguiló en el cargo, Paulí Buchens, indicó que las elecciones de 1979 representaron «el triunfo de la sociedad». La alcaldesa destacó que ayer era un día «para el recuerdo y la gratitud» hacia todas aquellas personas que hace 25 años trabajaron para la recuperación de los ayuntamientos democráticos, y añadió que, junto a ellos, hay que trabajar ahora «por el futuro de Palma».
Saiz, por su parte, destacó que quienes resultaron elegidos concejales en 1979 trabajaron, por encima de sus diferencias, «por el bien de la ciudad», y señaló que los antes adversarios políticos son hoy, en muchos casos, grandes amigos. «Nunca hay que llevar más allá de un cierto límite las discusiones políticas», dijo. Sus palabras no podían resultar más oportunas en un día como ayer, en donde resultó imposible consensuar una declaración institucional entre los distintos portavoces municipales, Antoni Nadal por el PP, Antoni Roig por el PSOE, Eberhard Grosske por EU-EV y Pere Muñoz por el PSM-EN, que acudieron también a Bellver. Por último, intervino Aguiló, quien señaló que de todas las expectativas que se tenían hace 25 años, «algunas se cumplieron y otras no», si bien destacó que el balance que puede hacerse «es, en general, positivo». «Ahora tenemos una democracia auténtica», resumió. A continuación, fueron entregados diplomas a los candidatos que se presentaron en 1979, que luego departieron animadamente con ex concejales de todos los partidos en posteriores legislaturas.