El colegio San Vicente de Paúl de la Soledat, que ya se prepara para la celebración de su centenario, está siendo escenario esta semana de la elaboración por parte de los alumnos de los tradicionales crespells, con motivo de la llegada de la Pascua. Esta es una actividad que, desde hace bastantes años, realizan en el colegio, participando desde los más pequeños, con edades comprendidas entre los seis y los siete años, hasta los alumnos de sexto de Primaria.
Los alumnos, que son los grandes protagonistas, se transforman por unas horas en pequeños reposteros, encargándose de mezclar con esmero todos los ingredientes de la receta y de colocar la mezcla obtenida en los pequeños moldes de variadas formas para posteriormente hornearlos, contando para ello con la ayuda de sus profesores. Entre el lunes y el martes los más menudos, bajo la atenta mirada de los maestros y con alguna ayuda de alumnos de otros cursos, se dedicaron entusiasmados a esta labor.
Magdalena Comas es profesora de Primaria y asegura «Casi todos coincidimos en la elección de los crespells, al considerar que no es muy laboriosa su preparación y es algo que les gusta a todos». Cada una de las nueve clases del centro educativo realiza alrededor de tres kilos del típico dulce, para finalmente repartirlo entre todos. Para que no sea tan sólo algo puntual, los pequeños también se llevan la receta a casa, para poder repetir la experiencia con la ayuda de sus progenitores.
Ana B.Llopis / Xisca Muñoz