R.P.F
«Estamos ante una muy buena noticia. Hace quince días nadie
confiaba que el Govern renunciara a construir esta
infraestructura». Con estas palabras se expresaba el portavoz de la
Plataforma antiautovía, Miquel Gelabert, después de conocer el
compromiso al que habían llegado Jaume Matas y Francesc Antich.
Gelabert agradeció a todos los mallorquines y mallorquinas que se
han manifestado en contra del proyecto, «pero especialmente a las
50.000 personas que salieron a la calle el pasado 14 de febrero
para pedir una rectificación del Plan de Carreteras pactado entre
el Partido Popular y UM». Y es que los activistas atribuyen la
«marcha atrás» de Matas a la movilización ciudadana. «La constancia
en las protestas de los diferentes colectivos y de millares de
personas a título individual han hecho posible este triunfo, y han
obligado al PP ha retirar este proyecto absurdo», indicó
Gelabert.
Pero a pesar de la satisfacción inicial, desde la Plataforma se interpreta que, de momento, lo que hace el president de Balears es aparcar sus intenciones iniciales. «Tenemos que dejar claro que nos oponemos a la autovía Inca-Manacor ahora y siempre, por eso no descansaremos hasta que la infraestructura quede descartada definitivamente». Por su parte el presidente del GOB, Macià Blàzquez, dio la enhorabuena al Govern por su rectificación. «Es lo primero que tenemos que decir, porque el hecho de que se rechace esta barbaridad es completamente positivo», manifestó. Pero el líder ecologista no se mostró conformista con la noticia. «Quiero suponer que los argumentos que han llevado a Jaume Matas a retirar esta propuesta de infraestructura vial también son aplicables a los otros proyectos previstos en el Plan de Carreteres y en el convenio que han firmado el Ministerio de Fomento y la conselleria d'Obres Públiques», advirtió.
Por otra parte, los alcaldes de los municipios afectados por el proyecto de la autovía Inca-Manacor acogieron con sorpresa y manifiesta alegría la noticia de la retirada del proyecto por distintos motivos: Los contrarios a la realización de la nueva vía por haber conseguido su propósito y los que la aceptaban por los «beneficios que tendrá para Balears» el acuerdo entre Jaume Matas y Francesc Antich. Alcaldes que desde un principio mostraron su oposición frontal a la autovía como el de Petra, Joan Font (PSM); el de Sineu, Josep Oliver (UM) o el edil de Maria de Salut, Jaume Mestre, pasaron del desaliento que se había instalado en el Pla de Mallorca -muchos daban la «batalla» por perdida- a la alegría más desbordante después de comprobar que sus presiones no han sido en vano.