Seis millones de euros en subvenciones electorales y que Izquierda Unida (IU) pueda formar grupo propio en el Congreso de los Diputados depende, en estos momentos, del resultado obtenido por la coalición Progressistes per Balears.
Progressistes per les Illes Balears (formada por el PSM, EU, ERC y Els Verds) logró 40.179 votos en las Islas. Estos votos son decisivos para que Izquierda Unida sobrepase el 5% estatal necesario para formar grupo propio. El porcentaje logrado por las candidaturas de Llamazares (sin contar Progressistes) es de 4,96%. Según explicó ayer el coordinador de EU en Balears, Miquel Rosselló, antes de las elecciones se estableció que los votos de Progressistes se sumarían en un primer momento a IU aunque luego su representante (si lo lograban) se adscribiría al Grupo Mixto.
«IU -aclara Rosselló- se presentó en coalición en varias circunscripciones y en todas ellas se informó de este hecho a las juntas electorales de zona para que lo comunicaran al Ministerio de Interior». El coordinador de EU indica que «todos los partidos de la coalición firmamos un documento ante notario que enviamos a la junta pero, por lo que sea, la de Balears no lo comunicó a Madrid en el plazo marcado».
Ahora han presentado un recurso ya que, además, la supervivencia económica de IU depende del reconocimiento de los votos de Balears. De conseguirlo finalmente, la federación de izquierdas podría percibir los 6 millones de euros -por haber concurrido a las elecciones en toda España- que corresponden a subvenciones por gastos de envío de sobres y papeletas electorales o de propaganda y publicidad electoral, que sólo se otorgan a las candidaturas que logren grupo parlamentario. Miquel Rosselló indicó ayer que todos los partidos de la coalición están de acuerdo en «entregar» a Llamazares los votos de las Islas. De no ser así, tampoco llegaría a las Islas el dinero necesario para costear su buzoneo y su campaña. Rosselló da por hecho que el recurso se aceptará.