Balears cuenta con un nuevo sistema de subasta electrónica de venta de pescado «más justo», según lo definió la consellera d'Agricultura i Pesca, Margalida Moner, al inaugurar las instalaciones en sa Llonja junto al director general de Pesca, Miguel Angel Calviño, el presidente de Opmallorcamar, Josep Capó, y el patrón de la cofradía de Palma, Domingo Bonnín, entre otros armadores e invitados.
El nuevo sistema de subasta electrónica a la baja por cinta, como se denomina, permite a 223 armadores censados y a unos 120 compradores diarios, pujar por las piezas de pescados «en igualdad de condiciones», según reiteró Moner. El volumen de negocio diario que se puede alcanzar a través de las pujas, asciende a unos 60.000 euros, según confirmaron algunos de los patrones presentes.
El género es exhibido en una cinta instalada en el centro de dos gradas en las que se acomodarán los armadores y patrones. El pescado tendrá un precio de salida, visible en un marcador electrónico, que irá descendiendo si ninguno de los ofertantes pulsa un botón que estará a su disposición. Si alguien se adjudica la pieza en cuestión, el pescado será embalado de inmediato con etiquetas que informarán de su procedencia y calidad. «Esta modalidad era una vieja aspiración de todo el sector y para mí es una alegría que este Govern, juntamente con el sector implicado, lo haya puesto en marcha. Hemos apostado de forma decidida por estas instalaciones porque es la única manera de aspirar a incrementar los niveles de competitividad del sector, con lo cual, sa Llonja alcanza los mejores niveles de calidad de España y el mundo», declaró la consellera d'Agricultura i Pesca.