N. DOMBLAS/J. T. B.
Los candidatos de la coalición Progressistes per les Illes Balears
se desplazaron ayer en campaña hasta la entrada del hospital Son
Dureta para denunciar el déficit de financiación del sistema
sanitario de las Islas, que, en su opinión asciende a 1.000
millones de euros. Nanda Ramon, Cecili Buele y Miquel Angel Llauger
quisieron simbolizar esta deficiente financiación con la colocación
de una cama a las puertas de la zona de urgencias del recinto
hospitalario. Con ello pretendían denunciar la falta de camas para
poder atender a los pacientes como corresponde.
En concreto, los representantes de la coalición aseguraron que el presupuesto medio de sanidad por habitante es de 786 euros en Balears, cuando la media nacional es de 955 euros, lo que da una idea clara de la falta de medios con la que se trabaja en el archipiélago. La candidata de los progresistas, Nanda Ramon, aseguró que el aumento de población que ha experimentado la Comunitat, junto con la necesidad de atender a los millones de turistas que cada día visitan las Islas hacen que los actuales recursos sanitarias sean «insuficientes» para cubrir la demanda.
Para Ramon, Buele y Llauger, es imprescindible que el Gobierno aumente la dotación económica sanitaria, que ya llegó muy mermada cuando se aprobó el traspaso de competencias en esta materia a lo largo de la pasada legislatura. Los miembros de la coalición se compromete además a intervenir seriamente para conseguir una verdadera reducción de las listas de espera y para aumentar el tiempo medio de atención de los médicos al paciente, con un mínimo de 10 minutos de media.