La pugna entre grupos turísticos y las presiones de Iberia han provocado el cisma en la Asociación Española de Compañías Aéreas (AECA), al constituirse este miércoles en Madrid la Asociación de Compañías Españolas de Transporte Aéreo (ACETA), que engloba a las aerolíneas Iberia, Air Nostrum, Air Europa, Iberworld y Gestair.
La creación de esta nueva patronal de aviación, que tiene su sede en Madrid y está presidida por Juan Losa (ex director del plan de reducción de costes de Iberia), provocó ayer en el sector aeronáutico balear y nacional todo tipo de comentarios. La patronal AECA, con sede en Palma, mostraba su descontento por cómo han evolucionado los acontecimientos: «Lamentamos que la representación de los empresarios se divida. Entendemos que cada uno es libre de asociarse o agruparse en la defensa de sus intereses. En AECA siempre hemos defendido los intereses del sector por encima de los intereses particulares. Y seguiremos persistiendo en la agrupación mayoritaria de empresas del sector aéreo».
El presidente fundador de AECA y director general de Air Berlín en España y Portugal, Àlvaro Middelmann, puesto al corriente de esta división, comentó: «Mi primera reacción es de tristeza, porque si la entrada de Air Berlín como asociado en AECA ha contribuido a esta reacción, lo lamento porque no se ha entendido nada. AECA siempre ha actuado de manera profesional. Y si hay otras razones, como la competencia entre grupos, habrá que preguntarse por qué se ha llegado a esta situación».
Fuentes aeronáuticas indican que la pugna entre el grupo Marsans y Globalia, así como los intereses contrapuestos de Iberia, han sido la principal causa de la creación de ACETA. Un comunicado de Iberia indica que esta nueva patronal nace «con el objetivo de mantener los intereses comunes de sus asociados dentro de la industria del transporte aéreo».