El president del Govern, Jaume Matas, aprovechó ayer el acto central de la Diada de Balears para defender las carreteras seguras, las nuevas infraestructuras que necesidad Balears, el bilingüismo y abogó por una sociedad tolerante y hospitalaria para recibir esta nueva oleada de immigración que ha registrado las Islas durante los últimos años. Tras la entrega de la medalla de oro de la Comunitat y los premios Ramon Llull celebrda anoche en Sa Llonja, Matas afirmó que las «elecciones son la herramienta que legitiman las decisiones a partir del cumplimiento del contrato que cada partido político establece con la ciudadanía». «Y es en el Parlament -puntualizó el president del Govern- donde la ciudadanía ve representadas sus decisiones y donde cada uno debe hacer frente, desde el Govern o la oposición, a las responsabilidades que les ha encomendado la ciudadanía. Romper las cartas si la mano que nos ha tocado no nos gusta, choca frontalmente con las reglas».
En este sentido, Matas enumeró durante su discurso de la Diada de Balears lo que, según él, reclamn los ciudadanos de las Islas: puestos de trabajo, acciones para recuperar la competitividad, viviendas a precios razonables, carreteras mejores y más seguras, abastecimiento de agua y energía, además de dar respuestas a los problemas en materia de sanidad, y educación. Para resolver este listado de problemas, Matas pidió el apoyo de todos los partidos que conforman el arco parlamentario. Y reclamó «las máximas implicaciones».
Además, Matas volvió a insistir en la necesidad de desarrollar al máximo el Régimen Especial de Balears. Y, en este contexto, el jefe del gabinete balear reconoció que el anterior conseller d'Economia, el socialista Joan Mesquida, jugó un papel decisivo para alcanzar importantes acuerdos con el fin de definir el marco financiero. «Hemos de continuar avanzando», reclamó el president.
Durante su discurso, Matas destacó que la población en Balears ha crecido un 4'4 por ciento en los últimos dos años, muy por encima de la media española y de la europea. «En los diez últimos diez años, nuestra población se ha incrementado en 170.000 personas», subrayó. En este sentido, Matas apuntó que durante los últimos años se ha producido una tercera oleada de inmigración formada por personas procedentes de países extracomunitarios, que están reclamando los servicios adecuados en materia sanitaria y educativa. «Hoy en nuestras aulas hay alumnos de hasta 104 países diferentes», agregó Matas. Para el president del Govern, estos alumnos «deben tener acceso a las dos lenguas de la Comunitat». Matas defendió el bilingüismo en un discurso íntegramente en catalán.
En su intervención en Sa Llonja, el president del Govern pidió a la sociedad balear que haga un esfuerzo de «tolerancia y de flexibilidad para acoger a los nuevos ciudadanos». «Hemos de poner al alcance de los inmigrantes todo aquello que es nuestro, con una doble finalidad: facilitar a los que quieren vivir con nosotros los instrumentos para hacerlo y, al mismo tiempo, mantenernos nosotros mismos en nuestras raíces más íntimas y profundas».
Sobre este mismo asunto, Matas convocó a los ciudadanos de Balears «para que las Islas sean la tierra de la tolerancia y hospitalidad que queremos, con unas señas de identidad propias, fuertes y arraigadas».
Además, el president del Govern también pidió un buen clima de entendimiento institucional y planteó la necesidad de mantener buenas relaciones con el Gobierno central para conseguir mejoras en materia de sanidad y educación. «Quiero aprovechar la solemnidad de la celebración de la Diada para hacer un llamamiento a todos, sin exclusiones, a la responsabilidad y a la colaboración en estos objetivos», solicitó.
El president del Govern arrancó su intervención elogiando la figura del empresario Llorenç Fluxà, medalla de oro de la Comunitat a título póstumo, por haber sido un creador de riqueza desde sus empresas. «Son los mismos baleares universales que construyeron Sa llonja y el Consolat, que se proyectaron por todo el mundo conocido, navegaron por todos los mares y fueron, avant la lettre, arquetipos del que hoy llamamos empresarios», dijo.