Pasada por agua. Así fue la Rueta de Manacor que se celebró ayer en el centro peatonal de la localidad y que a pesar del mal tiempo, reunió a decenas de niños y niñas dispuestos a lucir sus mejores galas y a disfrazarse de sus personajes favoritos.
Los más pequeños de la casa pasaron un rato de lo más entretenido bailando al ritmo de las actuaciones musicales que el Ajuntament había dispuesto para la ocasión. Así que varias de las calles del centro peatonal se llenaron de fiesta, aunque no tanto como en anteriores ocasiones en las que el tiempo acompañó un poco más, y de pequeñas comparsas llenas de color que restaron tristeza al día gris de la pasada jordana de Dijous Llarder. Pintores de brocha gorda, patinadores, esquimales, héroes de los cómics presentes y pasados, pistoleros, indios y todo tipo de fauna animalística, se dieron cita ayer en la Rueta de Manacor.
A pesar de los disfraces tan dispares, todos los niños de Manacor abandonaron por unas horas sus diferencias y bailaron al ritmo de los grupos Spaguetti, Cucorba, Rural Infantil, 40 Llamps y Toni Peppons que se habían repartido entre la plaza de sa Bassa, el Palau y la plaza Weyler. La incertidumbre reinó ayer en Manacor hasta el último momento. Pocos minutos antes del inicio de la Rueta -hacia las 18.00 horas de la tarde- estuvo lloviendo en la localidad. Finalmente, el tiempo dio una tregua breve a los más pequeños y dejó que sus padres les disfrazaran con el esperado traje de fiesta. Los darrers dies llegaron ayer a Manacor para calentar motores en vistas a la gran fiesta de Carnaval que se prepara en la ciudad para el próximo sábado. Un evento que también tendrá como escenario el centro de la localidad y en el que se darán cita grupos musicales.
C.V./ M.P.