Las obras de asfaltado con antideslizante en un tramo de cien metros de la autopista de Inca, a la altura del kilómetro 2 en dirección de Palma a Inca, provocaron ayer a lo largo de toda la mañana de ayer retenciones de tráfico y colas kilométricas de coches. El Departament d'Obres Públiques, a través de la Direcció Insulara de Carreteras, se vió obligado a cortar de forma alternativa uno de los dos carriles, «para garantizar a los conductores un uso más seguro del vial. Agradecemos la colaboración de todos los usuarios y también pedimos dispulpas por las molestias que se puedan ocasionar».
El asfaltado se produjo en un tramo de cien metros, que en los últimos tiempos había sido un punto negro en este tramo de la autopista por los numerosos accidentes que se producen en esta zona.
Dicho tramo estuvo comprendido en el sentido de Palma-Inca, después de la salida de Son Cladera, de ahí que en una jornada con buena climatología se fueran produciendo retenciones por la afluencia del tráfico en una jornada dominical a lo largo de toda la mañana, llegándose a provocar en algún momento situaciones de nervios entre algunos conductores por la tardanza y la acumulación de las demoras, que en algún momento superaron los veinte minutos en los momentos punta de tráfico.